“El saber implica una gran responsabilidad revolucionaria”

Esta frase, publicada desde la cuenta de Twitter de Flavia Angelino, resume su posicionamiento ante la realidad. Estudiante de la Maestría en Filosofía de nuestra Universidad Nacional de Quilmes (UNQ) y orientadora vocacional de la Escuela Primaria Nº 9 de Quilmes, la socióloga y docente mostró con acciones aquello que en las aulas se sostiene como mantra: el acto pedagógico no es sólo la transmisión de conocimientos, y las instituciones educativas no trabajan sólo para brindar acceso a contenidos académicos.

En estos días se conoció un hecho tan duro como cotidiano en los contextos más vulnerables de nuestra sociedad. Uno de sus alumnos no se conectaba desde por lo menos un mes a las clases por videoconferencia, por lo que se toma la decisión institucional de enviar a Flavia para saber qué sucedía y qué se podía hacer desde la Escuela para ayudar.

Al llegar al domicilio logró evitar lo que sería un inminente riesgo para la vida de una mujer en situación de violencia.

En lugar de mantenerse en la apatía o considerar que un suceso de violencia intrafamiliar y de género son cosas que pertenecen al ámbito privado, intervino y puso como prioridad al estudiante, su hermano y la atención de su madre. Gracias a ella, la mujer sobrevivió y su estudiante y su hermano fueron a casa de familiares que los resguardaron.

Las decisiones ante una situación límite son uno de los temas que más debates pueden suscitar en el ámbito de la filosofía. En el caso de Flavia, se hace evidente que la calidad profesional y la calidad humana pueden ir de la mano. 

Desde la Secretaría de Posgrado es un orgullo tener entre nuestrxs estudiantes a personas como ella, que luchan día a día por un país más justo y menos violento desde el espacio que compartimos: la Educación.